“Sueño con una
opción misionera capaz de transformarlo todo, para que las costumbres, los
estilos, los horarios, el lenguaje y toda estructura eclesial se convierta en
un cauce adecuado para la evangelización del mundo actual más que para la
autopreservación. La reforma de estructuras que exige la conversión pastoral
solo puede entenderse en este sentido: procurar que todas ellas se vuelvan más
misioneras, que la pastoral ordinaria en todas sus instancias sea más expansiva
y abierta, que coloque a los agentes pastorales en constante actitud de salida”
(EG 27)
En este texto, el
Papa Francisco apunta hacia cuestiones cruciales a la hora de entender el
anuncio del Evangelio en el mundo actual:
1º- Para poder
anunciar adecuadamente el Evangelio debemos empezar por cambiar “nuestra estructura
eclesial” a todos los niveles: estructuras físicas, psicológicas, emocionales,
relacionales, teológicas, culturales…
2º- Este cambio solo
puede ser posible si no se hace desde la necesidad de “autopreservación” sino
desde la docilidad al Espíritu que nos encamina hacia las raíces de nuestra
vocación cristiana, que es esencialmente misionera.
3º- La acción
misionera se refiere más a una actitud constante ante la vida, donde estamos
llamados a ser testigos del amor de Dios de palabra y obra. Viviendo, en todos
los contextos posibles, en constante actitud de salida.
4ª- Que la
conversión pastoral, por tanto, es estructural y personal (ya que dicha estructura está formada por personas), y todos los cristianos,
sin excepción, estamos llamados a ser corresponsables de este proceso.
5- Tanto el texto citado
como los puntos de reflexión son totalmente extrapolables a lo que se conoce
como “evangelización en la Red”.