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¡Cuánto nos
encanta volver a verte!...
Su respuesta ha sido:
-
Ya… pues no será por mucho tiempo pues
me marcho. Me marcho para quedarme allí como misionero, para siempre.
Y
así comenzó nuestra conversación.
Iñaqui
ha estado, durante tres meses, en una parroquia de Cojimíes de Manabí, en
Ecuador. Y la tarea que se le encomendó, junto con un grupo de voluntarios, fue
poner en marcha la Caritas parroquial. Cosa que se tomó muy en serio. Se nota,
sobre todo, por la pasión y entusiasmo con la que nos habla de todo aquel
proceso.
Según
nos contó, ahora ese pequeño grupo ha crecido y está formado por 15
voluntarios, que se mueven según tres grandes objetivos. Por un lado hacer de
Cojimies una sociedad más solidaria y más fraterna, por otro, detectar,
coordinar, intervenir y acompañar situaciones de necesidad, ya sean
individuales o colectivas, y por último, generar redes sociales para que toda
la sociedad se comprometa en la mejora de las condiciones sociales de todos sus
ciudadanos.
Durante
estos días por Pamplona ha conseguido recaudar libros, coordinado con los
Traperos de Emaús, para montar allá una pequeña biblioteca.
Según
nos cuenta, además, la parroquia está preparada para acoger a jóvenes, y no tan
jóvenes, para vivir una experiencia de voluntariado. Así que ahí queda la
invitación.
Un fuerte abrazo Iñaqui!!!! Y suerte con todo!!!!