Esta propuesta se presentó en la
XLVI Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales
20 de mayo de 2012
La reproducimos por su actualidad:
“La
idea a desarrollar es la de un plan “integrante” para las comunicaciones sociales,
a partir del
que se pueda
realizar una programación
pastoral que no
se limite solo a la delegación diocesana de
comunicación social o de los medios, sino capaz de implicar a todos los ámbitos pastorales. El plan tiene que
adecuarse al contexto específico de la
diócesis, teniendo en cuenta que «las condiciones de los medios y las oportunidades que se ofrecen a la Iglesia
en el campo de las comunicaciones sociales son diversas entre nación y nación y
también entre diócesis y
diócesis de un
mismo país». Es
importante por lo
tanto calibrar el proyecto
sobre las cuestiones más relevantes, destinadas a determinar el éxito o el fracaso del plan mismo,
individuando objetivos realistas y
realizables.
CONJUGAR
FE Y CULTURA
Hacer
que todos sean capaces de conjugar la experiencia de la fe con la
nueva cultura mediática, para
dar plena realización
al mandato de Jesús
que nos ha
dado al Espíritu
Santo para que en todo
tiempo y según el lenguaje de cada época se anuncie el
Evangelio.
ENTENDER
Y HABLAR LOS NUEVOS LENGUAJES MEDIÁTICOS
Hacer que
cuantos tengan responsabilidades en
la Iglesia, los
ministros, los catequistas y todos los fieles sean capaces de entender,
interpretar y hablar el “nuevo
lenguaje” de los medios y no se desentiendan del deber de usarlos, junto a las
nuevas tecnologías informáticas, para quitar
los obstáculos al
progreso humano y
a la proclamación
del Evangelio, con una particular atención a las personas
más alejadas y en dificultad;
INTEGRAR
A LOS MEDIOS CON LA PASTORAL
actuar para
que los medios no sea
utilizados para dar informaciones, sino también para
desarrollar el crecimiento y la maduración de la fe. Esto sucede solo cuando una diócesis, más
allá de poseer una visión nueva y
orgánica de la comunicación
de la fe, se dedica
a los medios utilizándolos no
de forma aislada, sino en el interno de
una estrategia pastoral;
FORMAR
A LOS AGENTES DE PASTORAL
desarrollar
el sentido crítico, necesario para una sincera búsqueda de la verdad. En general, la capacidad de los
medios para concebir ideas y abrirse a la confrontación se incentiva también en
el plano religioso, aún teniendo cuidado para que los contenidos de la fe no se
banalicen, se manipulen o se conviertan en espectáculo;
FAVORECER
LA BÚSQUEDA DE LA VERDAD
formar
comunicadores no aislados, ni agentes de pastoral dispersos, para impulsar con decisión un plan integral
de las comunicaciones, sabiendo que comunicar es una dimensión imprescindible
de toda actividad o proyecto pastoral;
COMPARTIR
LOS RECURSOS Y CREAR SINERGIAS
compartir
los recursos favoreciendo una sapiente sinergia entre las muchas iniciativas
mediáticas. El patrimonio
de los medios
presentes en la
diócesis se integra con las
diversas realidades existentes a nivel local, interdiocesano, regional,
nacional y en algunos casos también internacional;
PARTICIPAR
EN EL PROGRESO DE LOS PUEBLOS
favorecer una
comprensión del significado
de la nueva
era de los
medios y de su impacto en el desarrollo de los pueblos y de las
culturas, en vistas de una comunidad eclesial que sea capaz de
responsabilizarse en los procesos culturales, con compromisos de vigilancia y
de real participación en el progreso de
los pueblos;
INVERTIR
RECURSOS HUMANOS Y ECONÓMICOS
garantizar
los recursos humanos y económicos
necesarios al pleno desarrollo de los
proyectos, promoviendo la formación
cualificada de los agentes, también presbíteros, y haciendo
crecer una sana cultura de empresa capaz
de ofrecer eficiencia
y adecuados perfiles
económicos en la gestión de los
medios.”